Jugar con el pene
La idea no es nueva. En los viejos manuales de erotismo ya venía recogida: hay estímulos sexuales que, basados en el uso de una pequeña dosis de violencia, sirven a las mil maravillas a la hora de aumentar el erotismo de la relación sexual. En alguna ocasión hemos hablado de las posibilidades eróticas de una nalgada, de cómo un pellizco en los pezones puede resultar sumamente estimulante o de cómo un mordisco dado con la fuerza justa en un lugar muy concreto de la anatomía del hombre o de la mujer puede servir para activar en él o en ella los mecanismos que, funcionando correctamente, les llevarán hasta las puertas mismas del orgasmo.
En este artículo vamos a tratar de un estímulo muy especial: los golpes en el pene. ¡Ojo! Cuando decimos en el pene no queremos decir en los genitales masculinos. Los testículos deben quedar, en todo momento, al margen de cualquier tipo de golpeo.
Un golpe el pene puede resultar muy excitante si está realizado en el momento adecuado y con el instrumento adecuado.
¿Cuál es el momento ideal para golpear un pene? Aquél en el que el pene en cuestión se encuentra en estado de semierección. Un golpe en el pene semierecto será algo así como un empujoncito para alcanzar la completa erección. Por el contrario, un pene erecto es un pene demasiado rígido y sensible como para obtener algún beneficio erótico de un golpe en él. En esa situación, un golpe puede resultar doloroso y jugar en contra de dicha erección.
¿Con qué se puede golpear un pene eróticamente? Sin duda, lo más útil a la hora de conseguir aumentar la excitación es utilizar las diferentes partes del cuerpo para golpear el pene. Pueden servir los dedos y la mano, claro, pero también la lengua, la cara, los labios, los pechos… Si se desea emplear algún tipo de instrumento hay que procurar que dicho instrumento no sea rígido y que no tenga borde afilado de ningún tipo.
Unos golpes en el pene pueden ser un complemento excelente para una felación. Golpear el pene contra la lengua o contra los pechos puede resultar muy excitante para el hombre.
Golpear con el pene
El golpe del pene contra los pechos o los pezones puede ser también un complemento excelente para una fantástica paja cubana. Este tipo golpe en el pene puede resultar muy excitante tanto para él como para ella.
El golpe en el pene puede formar parte, también, de un juego de dominio o sumisión. Si ella es la sumisa, el hombre puede servirse del pene para golpear la cara de ella. Si es él el sumiso, ella puede servirse del golpe en el pene como forma especial de tortura CBT.
El golpe con el pene sobre los labios vaginales y el clítoris puede servir para prolongar la tensión sexual. Éste es uno de los golpes con el pene que aparece recogido en el Kama Sutra.
El golpe en el pene también puede ser empleado para prolongar la práctica sexual. Golpeando el pene del hombre que se está acercando al orgasmo puede evitarse que éste se produzca. El golpe en el pene se está utilizando en esta ocasión con la finalidad de rebajar la excitación y controlar la eyaculación.