Antiafrodisíacos
Quien más quien menos sabe que hay alimentos con propiedades afrodisíacas. Quien más quien menos ha bromeado alguna vez con la ingesta de ostras, maca o fresas o con el consumo de canela, higos o chocolate. Pero, del mismo modo que existen alimentos cuyo consumo asociamos al incremento de la libido y al aumento del deseo sexual, también existen alimentos que, ingeridos con exceso, pueden atentar contra nuestra vida sexual.
En muchas ocasiones, señalan los expertos, las disfunciones sexuales son resultado de una dieta mal planificada. Después de todo, tras una mala salud cardiovascular se oculta en la inmensa mayoría de los casos una mala alimentación. Y el sistema cardiovascular, no lo olvidemos, desempeña un papel fundamental en la vida sexual de las personas. Al fin y al cabo, la erección es resultado de la acumulación de la sangre en una parte muy concreta de la anatomía masculina. El mal funcionamiento del sistema sanguíneo se traduce en muchos casos en una erección defectuosa. Para mejorar el nivel de éstas, pues, hay que introducir cambios en la dieta. Reducir el consumo de alcohol, así como reducir o eliminar la ingesta de harinas refinadas y de bebidas azucaradas, por ejemplo, servirá para mejorar nuestras erecciones. Al fin y al cabo, lo que se recomienda para mejorar nuestras prestaciones sexuales es lo mismo que se recomienda para cuidar nuestra salud cardiovascular, esto es: hacer deporte, mantener una dieta rica en frutas y verduras y reducir o eliminar el consumo de esos alimentos que perjudican a nuestra salud sexual.
Alimentos malos para el sexo
¿Qué alimentos afectan negativamente a nuestra salud sexual? Los que vamos a indicarte a continuación:
- Alcohol. El exceso de alcohol puede entorpecer el sistema nervioso central y puede provocar disfunción eréctil, dificultadas para alcanzar el orgasmo y, en algunos casos, eyaculación precoz. Además, el consumo continuado y abusivo de alcohol hace que disminuya los niveles de vitamina A, lo que, a la larga, produce esterilidad.
- Azúcar refinado. Entre los alimentos perjudiciales para la salud sexual, pocos son tan negativos para ella como lo es el azúcar refinado. Un elevado nivel de glucosa en la sangre hace que disminuya el deseo sexual. Además, ese nivel alto de azúcar en la sangre puede provocar daños en los nervios, el tejido eréctil y los vasos sanguíneos del pene.
- Bebidas gaseosas. Las bebidas gaseosas son, también, un alimento perjudicial para la salud sexual. Hay estudios que apuntan a que los refrescos azucarados pueden predisponer a la persona hacia la depresión y afectar al apetito sexual.
- Café. Seguro que has oído o leído alguna vez en algún lugar que el café mejora las erecciones. Sí, es cierto. Y eso, claro, es bueno para las relaciones sexuales y para vivir una satisfactoria vida sexual. Pero, más allá de asumir ese beneficio sobre las erecciones, hay que tener presente que, a la larga, el café puede afectar negativamente a nuestra vida sexual. ¿Por qué? Porque reduce la producción de cortisol, una hormona que cumple dos funciones: la de reducir o eliminar el estrés y la de activar el deseo.
- Carne roja. La carne roja posee grasas saturadas y éstas acaban incrementando los niveles de colesterol LDL (colesterol malo), lo que influye negativamente sobre la libido tanto masculina como femenina.
- Comida saturada. Los fritos, los productos envasados industriales, las grasas saturadas… cualquiera de estos alimentos es perjudicial para la salud sexual. Estos alimentos aportan exceso de calorías y de sodio, lo que fomenta el aumento de peso y la obesidad. Al mismo tiempo, pueden alterar los niveles de azúcar en la sangre e incrementar la presión arterial. Una presión arterial descompensada hace que el flujo sanguíneo no llegue a los genitales como es debido.
- Edulcorantes artificiales. En ocasiones se puede tener la tentación de sustituir el azúcar refinado por edulcorantes artificiales como todos aquellos que contienen aspartamo. Debemos decir que optar por esta opción a la hora de escoger un edulcorante es, también, perjudicial para la salud sexual. Estos edulcorantes artificiales inhiben la producción de serotonina, lo que se traduce en la aparición de situaciones de insomnio, irritabilidad, depresión, ansiedad, dolor de cabeza… Esto, unido a la reducción de la producción de dopamina provocada por su ingesta, hace de los edulcorantes artificiales un mal alimento para el sexo. Así, si deseamos utilizar algún edulcorante, lo mejor es huir tanto del azúcar refinado como de los edulcorantes artificiales para utilizar edulcorantes naturales como el agave, la estevia o la miel.
- Patatas. Las patatas fritas son, para muchos de nosotros, una auténtica tentación. Parece imposible el rechazar su incorporación a nuestra dieta. Y, sin embargo, debemos, en la medida de lo posible, evitar su ingesta. Abusar de las patatas no es bueno cuando se consumen hervidas, en puré o, mucho menos, fritas. ¿Por qué? Porque, consumidas en exceso y a la larga, pueden producir problemas circulatorios.
- Regaliz. Si consumes habitualmente regaliz deja de hacerlo. Hay una sustancia presente en él, la glicirricina, que consumida de manera habitual y en abundancia reduce los niveles de testosterona en los hombres.
- Soja. Seguramente has oído maravillas sobre la soja. Y, créenos, son ciertas. Pero no hay ningún alimento “milagroso”. La soja tampoco lo es. Pese a sus múltiples beneficios, consumida en exceso, la soja es un alimento perjudicial para nuestra vida sexual. No en vano, la soja es un alimento rico en isoflavonas. ¿Y qué efectos tienen las isoflavonas? Dos, y ninguno de ellos demasiado positivo. Por un lado elevan los niveles de estrógenos. Por el otro, reducen los de testosterona. Ese doble efecto hace que la libido disminuya.
Ahora ya sabes qué alimentos debes comer de madera moderada para impedir que tu alimentación acabe afectando negativamente a tu vida sexual.