Lencería erótica muy sexy
En una fantasía sexual tienes que sorprender a tu pareja y para conseguirlo la lencería erótica te puede resultar muy útil. A la hora de elegir qué tipo de lencería vas a ponerte, ten en cuenta la comodidad y la diversión, y sobre todo, piensa en lo que le gustará a tu pareja que lleves encima. Sujetador, corsé, corpiño, braguitas, tanga, ligueros… hay una infinidad de lencería erótica que seguro hará enloquecer a tu chico. Si el rol que habéis elegido para vuestra fantasía sexual es la de dos desconocidos, escoge un conjunto de lencería que se aleje de la ropa íntima que utilizas normalmente. Sé atrevida y sexy. Cuida también otros detalles, como el maquillaje o el peinado. Seguro que te sentirás muy atractiva con un minivestido ajustado a tus curvas o unos shorts vaqueros muy sexys. Debajo llevarás la lencería que hayas elegido, como un pequeño tanga bien ajustado a tu entrepierna y un bonito sujetador de encajes. Intenta complacer a tu pareja, pero recuerda que eres tú quien se va a poner la ropa, así que tienes que evitar sentirte ridícula. De tu comodidad depende una gran parte del éxito de la fantasía sexual. Un sex shop es una tienda ideal donde encontrar la mejor lencería erótica y los complementos más sexys.
Pero, como ya sabrás, el universo de la moda íntima no es únicamente femenino. La ropa interior masculina cada vez está más presente en el mundo de la moda. Por esta razón, el tipo de ropa que lleve puesta tu chico también es muy importante. ¿A qué chica no le resulta sexy una cazadora de cuero y unos vaqueros gastados? Incluso puedes sugerirle qué tipo de lencería te gustaría para él unos bóxer o slip. El complemento ideal para completar el look en la fantasía sexual es elegir el perfume adecuado… tienes el éxito garantizado. El secreto es combinar sensualidad y elegancia, en el caso de la fantasía sexual con un desconocido, o ser sexy y con cierto toque de vulgaridad en el caso de la fantasía sexual con una prostituta, enfermera, universitaria o bailarina de striptease. Así seguro que seducirás a tu amante y disfrutarás de miradas lascivas y coqueteo. Deja que él te mire e imagina la aventura de sexo que os espera a lo largo de la velada.
Lencería sexy, complementos y moda íntima
En los sex shops encontrarás toda la lencería erótica que imagines y mejor se adapte a ti, piensa que además de hacerte sentir atractiva, también es muy importante que te sientas cómoda pues te espera una auténtica maratón de sexo. Después de coquetear y beber, lleva el momento de las caricias lentas. Descansa tu pie en su entrepierna y nota como crece, mientras él acaricia tu muslo o espalda. Sentaros muy cerca, uno al lado del otro, susurrando cosas al oído, decirle lo que te gusta en la cama, lo que te excita. En poco tiempo, los dos os sentiréis muy excitados y te notarás mojada, entonces levántate y dirígete al baño. Él te sigue y cierra la puerta. De pronto, te da la vuelta y te inclina sobre el lavamanos mientras te dice que te va a follar ahí mismo. Mete su polla dentro de ti, por detrás y empieza a empujar dentro y fuera de ti. La excitación te hará gemir tanto que él tapará tu boca con su mano apretada, para evitar que os oigan fuera. Él aprieta tus tetas y te susurra al oído cosas sucias como que eres una zorra y te pregunta si quieres que te lleve a casa para seguir follando toda la noche. Entonces tendréis que recomponer vuestra ropa rápidamente para salir del local de manera discreta y regresar a casa en taxi. Piensa en los minivestidos, muy sexys, pues son la solución ideal ya que sólo tienes que subirlo y después puedes recomponerte fácilmente. Cuando lleguéis a casa, sorprende a tu pareja con tu mejor lencería erótica, y haz que disfrute de ella hasta que los dos quedéis completamente satisfechos. Apuesta por el abandono sexual total y deja volar tu imaginación. No tengas miedo a ser impulsivo y no dejes de utilizar, además de la lencería sexy, cualquier complemento que ambos deseéis, como máscaras, esposas, guantes, cuerdas… ¡ah y no olvides el lubricante íntimo, seguro que lo vas a necesitar!
