¿Con o sin pelos?
Hace ya tiempo que impera la moda, sobre todo entre las mujeres, de lucir el pubis depilado o, cuanto menos, recortado. Muchos hombres, poco a poco, van sumándose a esa moda de recortarse los pelines o, directamente, afeitarse testículos y pubis para, así, lucir unos genitales como los que lucen muchos actores porno. Hay hombres que, además, han optado por depilarse el pubis y los testículos para, de ese modo, aparentar unos genitales más lustrosos. Sin estar rodeados de pelos como alambres, los penes parecen más grandes. Y eso, ya lo sabemos, los hombres lo valoran mucho.
En esta sección en la que venimos proponiendo todo tipo de juegos y técnicas sexuales vamos a proponerte hoy una excitante y muy sensual sesión de peluquería púbica. Que tu pareja decida el aspecto que deben lucir tus genitales y se lo proporcione puede resultar muy excitante.
Lo primero que debe hacerse para jugar a la peluquería púbica es decidir qué tipo de técnica vamos a utilizar para realizar el depilado genital. Para ello debemos tener en cuenta varios factores: el tipo de pelo, la cantidad de pelo de la persona que debe ser depilada genitalmente, el tipo de resultado que queremos (¿deseamos dar una forma al vello del pubis?), el tiempo que se le puede dedicar a la depilación, la sensibilidad que la persona que va a ser depilada genitalmente tiene al dolor, la sensibilidad de la piel y el dinero que se quiere dedicar al afeitado genital.
Teniendo en cuenta que para nuestro juego de la peluquería púbica no vamos a emplear la técnica de la fotodepilación láser (quizás muy efectiva pero poco glamourosa y excitante) y que la cera o la crema depilatoria pueden, también, dar poco juego (a no ser que, sobre todo en el caso de la primera, queramos introducir un toque relativamente doloroso y BDSM al juego), optaremos por proponerte un juego de peluquería púbica basado en el uso de la técnica depilatoria de la maquinilla de afeitar. Optando por esta técnica de afeitado genital necesitaremos pocas cosas para jugar a la peluquería púbica: espuma o jabón de afeitar, agua, una toalla y, por supuesto, una cuchilla o una maquinilla de afeitar.
Preparativos
Para hacer de la peluquería púbica o afeitado genital un juego hay que crear el clima adecuado y tenerlo todo preparado para cuando nuestra pareja llegue a casa.
El mejor lugar para jugar a la peluquería púbica es, sin duda, el cuarto de baño. El cuarto de baño se puede limpiar fácilmente y siempre tendremos agua caliente a mano. En el cuarto de baño debe existir un lugar en el que poder sentarnos con las piernas bien abiertas. En caso de malas siempre podremos utilizar la taza del váter, aunque siempre es preferible disponer de alguna especie de banco.
La peluquería púbica también puede practicarse bajo la ducha caliente, pero el optar por esta opción puede resultar incómodo para la persona que debe realizar el afeitado púbico. No es fácil afeitar o depilar mientras nos está cayendo agua por encima.
A la hora de practicar la peluquería púbica es necesario asegurarse de que el espacio en que se va a realizar el afeitado púbico tiene la temperatura adecuada. Si vamos a pasar un rato desnudos, mejor que el sitio en el que vamos a hacerlo esté calentito. Al fin y al cabo, se trata de jugar a la peluquería púbica, no de pillar un resfriado.
Ambientado el lugar, y con la luz adecuada (es importante ver bien para practicar la peluquería púbica), colocaremos a mano todos los instrumentos y complementos que vamos a utilizar durante nuestro juego, es decir, cuchilla de afeitar, toalla, espuma y agua caliente.
El juego en sí
Para iniciar el juego de la peluquería púbica será necesario estar desnudos o, como mucho, vestidos con una simple bata o un albornoz. El acto de quitarse esta prenda puede estar cargado de erotismo si, por ejemplo, se realiza como si fuera un striptease. Una vez desnudos, ya podremos iniciar lo que es el afeitado genital en sí.
Para iniciar la depilación o afeitado púbico utilizaremos el agua caliente para reblandecer el vello púbico. Una vez hayamos reblandecido el vello del pubis, dejaremos que nuestra pareja inicie el afeitado y la depilación siguiendo su propia inspiración y capricho. Eso sí: indicaremos de inmediato cuándo, en alguna zona, se está apurando demasiado para evitar que nuestra pareja pueda irritarla al afeitarla en exceso.
El afeitado o depilación de la zona púbica durante el juego de la peluquería púbica puede ser completado con la depilación o afeitado de otras partes del cuerpo. Entre ellas podemos destacar:
- el pecho,
- el escroto,
- el perineo,
- el trasero.
Una vez haya sido afeitada la zona púbica, podemos pedir a nuestra pareja que, para rematar el juego de la peluquería púbica, coloque crema en la zona que ha sido afeitada para, con ella refrescarla.
Una vez se haya aliviado la posible irritación de la zona púbica y se haya acabado con el acto del afeitado púbico propiamente dicho, podremos optar por varios puntos y finales:
- Una apasionada práctica de sexo oral.
- Una ducha con sexo bajo el chorro del agua caliente.
- Intercambiando los roles. Es decir: proponiendo un “ya que tú me has depilado, me dejas que te depile yo”.
¿Te animas a jugar a este juego erótico?