Postura “Retozando por el culo”
Esta postura de sexo, si bien no se trata de sexo anal (griego), si que tiene similitudes con este ya que el culo de la mujer lo tendremos en pompa pero la penetración será vaginal (aunque se puede simultanear con penetración anal). Ella se acostará boca abajo, teniendo el pecho completamente pegado a la cama pero sus piernas estarán flexionadas dejando como apoyo las rodillas y las pantorrillas. Y eso sí, piernas muy separadas para dejar la vagina bien abierta para ser perforada. Con la puerta del placer abierta, el ya empalmado se posará detrás de ella de rodillas con sus piernas por el interior de las piernas de ella y meterá su polla erecta en la vagina húmeda. Una vez la mujer ya penetrada, la tomará por la cadera y la pegará a él, tomándola presa a su pene y deseos. Una vez esto, se necesitará un poco de coordinación hasta encontrar el ángulo perfecto y ella tendrá que experimentar para encontrar la altura de la cadera de entrada más fácil en la vagina. Una vez perfectamente encajados los amantes, ya no habrá límites para disfrutar de esta excitante postura de sexo.
Durante el coito, ella puede experimentar con la fricción y el agarre de la polla en su coño abriendo y cerrando las piernas hasta encontrar el punto que más disfrute le ofrezca. El puede jugar con la frecuencia y velocidad del empuje, hasta encontrar el ritmo que a los dos más placer les dé pero que no precipite la eyaculación. Para acompañar el movimiento, será preferible que tome a su amante por las caderas que ayudará que la penetración sea más profunda y ella se sienta más follada. Pero puede aprovechar las manos para acariciar sus pechos, estimular el clítoris o ambas cosas a la vez. Imaginad, una mano amasando sus tetas, los dedos de la otra manos jugueteando con el clítoris y la polla metiéndose bien dentro de la vagina. De todas formas, la lejanía de las tetas hace más recomendable que se utilice una mano para acompañar la perforación y la otra para pajear el clítoris. Y si a ella le gusta la penetración anal, también puedes meterle los dedos en el culo o utilizar un estimulador anal mientras la penetras vaginalmente, será una eclosión de sentidos para ella (estimulación del clítoris, la vagina y el ano al mismo tiempo).
Para una buena penetración es importante bien el ángulo por el que se ataca y esto puede favorecer la estimulación del interior superior de la pared vaginal, donde el Punto G se encuentra, suponiendo un gran extasis para la chica. Esta forma de follar es muy intensa para ambos. A ella le puede provocar varios orgasmos pero a él puede hacer que se corra muy rápido por lo que esta postura es recomendada para acabar el acto sexual y antes haber disfrutado con juegos eróticos, masturbación mutua, sexo oral y otras posturas más suaves. El sexo tiene que ser prolongado y el límite lo tenemos en el hombre por lo que son cuestiones a tener en cuenta.
Sensaciones de la postura para la mujer
Esta postura puede darle a ella desde una buena cuota de placer hasta volverla loca de placer. El mínimo placer lo encontrará si se practica esta postura con las manos del amante simplemente acompañando el movimiento. Si el ángulo por donde se ataca es el ideal para la estimulación del Punto G, la chica cierra las piernas al máximo para sentir mucha más fricción y el hombre tiene una polla muy grande, utiliza una mano para estimular el clítoris (con un vibrador mucho mejor) y con la otra utiliza un estimulador para penetrarle el ano encontrará el máximo de placer que una mujer puede experimentar y con un solo amante. Obviamente esta postura la habilita para hacerle una felación al mismo tiempo a otro hombre por lo que si se trata de una mujer liberal, mejor no dudar en hacer un trío y acabar el acto sexual con esta postura (o un intermedio). El summun sería que ambos hombres se corran al mismo tiempo que ella y el que recibe la felación no lleve preservativo (siempre que haya garantías sanitarias) para que ella sienta la eclosión del placer en su boca mientra experimenta el placer en vagina, ano y clítoris.
Sensaciones de la postura para el hombre
Esta postura es muy excitante para él por lo probablemente no pueda aguantar mucho antes de correrse y por ello insistimos que esta postura sea el colofón al acto sexual. Ella tiene que cerrar bien las piernas ya que eso provocará una fricción que dará mucho gusto a los dos. Esta postura además lleva al hombre a sus más lujuriosas raíces, ya que es de las que más se acerca a sexo en la naturaleza y le da una salida a sus instintos animales. Ver a la mujer en pompa, tenerla pegada a su culo y observar como su polla entra y sale en la vagina de su amante le dará un placer extra, aparte de los sentidos siendo demasiados estímulos para contener el esperma mucho tiempo dentro de él. Pero además puede añadir el estimulo de masturbar a la amante mientras la penetra vaginalmente como penetrarla analmente, ver como los dedos o un vibrador entra en el ano de la mujer, otra vista preciosa para el hombre morboso y lujurioso que hará que seguramente repita con frecuencia dicha postura.
Si entra en juego un segundo hombre en el acto, este recibirá la felación de la chica mientras contempla como su partenaire se la está follando. Al estar disfrutando la chica, la felación será muy intensa y succionará mucho por lo que además del espectáculo visual estará disfrutando de una mamada de esas que te exprimen todo por lo que la eyaculación será temprana (más todavía si entre ambos han estado folleteando con la chica). Esto está reservado para hombres afortunados que tienen la oportunidad de encontrarse con una mujer liberal y con muchas ganas de disfrutar de su sexualidad, algo que no se encuentra cada día.