Ejercicio para agrandar el pene

Vale, sí, ya lo sabemos: el tamaño no importa y bla, bla, bla. Hemos oído muchas veces esa cantinela. Ya hemos escuchado en más de una ocasión que no es tan importante el tamaño de una pistola como el saber utilizarla. Pero, a pesar de todo, nosotros queremos tener un buen Colt y no esa Glock 26 con la que nos dotó la naturaleza. Que nuestro pene sea más largo y más grueso. Que luzca bien en las fotos. Eso es lo que deseamos de verdad. Pero somos aprensivos. Nos da repelús el medicarnos con alguna de esas pastillas que se recomiendan en ciertos anuncios para aumentar el tamaño del pene. Y estamos dudando sobre si comprar o no uno de esos alargadores de pene o desarrolladores de pene que se anuncian en numerosos sexshop online. Mientras tomamos una decisión al respecto, podemos realizar lo que se llaman ejercicios de Jelquing. Ellos nos ayudarán, de una manera sencilla, a aumentar el tamaño del pene.

¿Qué son los ejercicios de Jelquing? Fundamentalmente, los ejercicios de Jelquing son unos ejercicios completamente naturales y destinados a agrandar y alargar el pene. Al parecer, estos ejercicios eran practicados hace ya siglos por árabes beduinos y formaban parte de un ritual de iniciación masculino. Al llegar a la pubertad, los hombres practicaban los ejercicios de Jelquing para, de ese modo, conseguir un pene más grande. Se dice que los adolescentes practicaban este ejercicio durante 30 minutos diarios y hasta llegar a la edad adulta.

Como todo tipo de ejercicio físico, será la constancia la que determine los resultados del método de Jelquing. Una vez al día y 5 o 6 días por semana sería lo ideal para conseguir los efectos deseados.

Así se realizan los ejercicios Jelquing

¿Cómo se realizan los ejercicios de Jelquing? Para hacerse una idea inicial de lo que son los ejercicios de Jelquing hay que tener presente que estos ejercicios reciben también el nombre de “ordenamiento”. Esta palabra es sumamente ilustrativa sobre los movimientos fundamentales en que se basa el método Jelquing para aumentar el tamaño del pene.

Antes de iniciar los ejercicios propiamente dichos hay que tener a mano un lubricante para la piel. Sin lubricante para la piel no deben realizarse los ejercicios de Jelquing pues, de lo contrario, la piel del pene resultaría dañada y el pene sería lastimado.

Para iniciar el ejercicio, aplica lubricante sobre toda la superficie del pene y también sobre las manos. Una vez lubricados pene y manos, realiza un suave masaje sobre el pene para estimular el flujo de sangre en él. Este suave masaje debe hacer que el pene quede parcialmente erecto o semi-erecto.

Una vez el pene esté en ese estado de semi-erección hay que sujetarlo por la base formando un círculo con los dedos. Éstos deben apretar con firmeza pero sin causar dolor.

El siguiente paso al realizar los ejercicios de Jelking es el de hacer resbalar los dedos lentamente hacia la cabeza del pene. Este movimiento forzará a la sangre en la corpora cavernosa.

Este movimiento debe realizarse de manera repetitiva y sin parar. Para conseguirlo, la mano libre debe iniciar el movimiento desde la base del pene cuando la otra ha llegado al extremo del pene.
Es importante reseñar que estos movimientos deben ser realizados cuando el pene se encuentra en situación semi-erecta. El pene completamente erecto no sirve para realizar estos ejercicios. Si, debido a la estimulación intrínseca a los movimientos del método Jelquing, se alcanza esa erección completa, hay que parar hasta conseguir de nuevo la flacidez necesaria para realizar los movimientos de estos ejercicios para agrandar el pene.

Cada sesión de ejercicio de Jelquing debe incluir alrededor del centenar de movimientos de este tipo. Los devotos de estos ejercicios para aumentar el tamaño del pene hablan de cómo tres meses de ejercicios pueden servir para comprobar un aumento sustancial del tamaño y el grosor del pene. ¿El resultado? Hablan de casi 3 centímetros de aumento.

Al practicar los ejercicios de Jelquing hay hombres que sienten un pequeño dolor u observan un leve enrojecimiento o amoratamiento en alguna parte del pene. Esto es resultado de la expansión de las células sanguíneas y del incremento del flujo sanguíneo en la zona. No hay que preocuparse en exceso por la aparición de estos enrojecimientos. Acaban por desaparecer. Suavizar la intensidad de los ejercicios acostumbra a bastar para que desaparezcan.

Como ves, el poseer un pene más grande y visualmente llamativo puede estar al alcance de tu mano. Sólo necesitarás un poco de constancia y paciencia para conseguir esos centímetros de más que siempre quisiste tener. Ah, y algún que otro bote de lubricante.