El sueño erótico en el hombre
No hace mucho tiempo dedicamos en esta sección un post a las principales fantasías eróticas femeninas. En esta ocasión vamos a bucear en algunas de las principales fantasías eróticas masculinas. Como se acostumbra a decir, la fantasía erótica no existe para exigir su cumplimiento. Que una persona fantasee eróticamente con algo no quiere decir que quiera convertir ese algo en realidad. La fantasía erótica reina en el territorio de la imaginación y es ahí donde cumple su cometido principal: estimularnos sexualmente. Ponernos a punto, vamos.
Hay otra frase que, hablando de sexo, solemos repetir como si fuera un mantra: cada persona es un mundo. Esa frase recoge una verdad incuestionable y se hace todavía más cierta cuando hablamos de sexo. Cada persona tiene sus propias fantasías y lo que para mí puede resultar muy estimulante a ti puede dejarte frío. Esto no quiere decir que, de vez en cuando, no puedan realizarse ciertas generalizaciones. En el caso de las fantasías eróticas masculinas, ese generalizar nos hace destacar ciertas fantasías que, de manera prototípica, vendrían a reflejar qué es aquellos que, imaginariamente, más estimula sexualmente a los hombres.
Una de las fantasías eróticas masculinas más comunes es la de practicar sexo en un lugar público. El poder ser sorprendidos en el probador de un centro comercial, en el fotomatón, en el cine o en la oficina pone mucho a muchos hombres. En esta fantasía erótica, cercana al dogging, prima el aspecto arrebatador de dejarse llevar por la pasión sin reparar en limitaciones.
La segunda fantasía erótica masculina más prototípica es la de participar en un trío junto a dos mujeres. Algunos hombres tienen esta fantasía erótica imaginando que participan en un trío con su pareja. Otros prefieren convertir a dos extrañas en las protagonistas de la misma.
Fantasías de voyeur
Otra fantasía erótica masculina muy común es la de imaginar a la propia pareja haciéndoselo con otra mujer. Las escenas lésbicas son algunas de las más buscadas por los hombres que bucean en internet a la busca de páginas de sexo en streaming. A los hombres les pone mucho ver a dos mujeres entregándose a los placeres del amor homosexual, y eso debía dejar su reflejo en sus fantasías eróticas. Por eso una de las fantasías eróticas masculinas más comunes es la de actuar como voyeur en una escena lésbica en la que una de las mujeres participantes sea la propia pareja.
Ese espíritu mirón que anida en el interior de los hombres se hace también muy patente en otra de las fantasías eróticas masculinas más comunes: la de contemplar a la propia pareja masturbándose. Fantasear con que se está observando a la pareja mientras se masturba pone mucho a los hombres.
También pone mucho a los hombres el fantasear eróticamente con la posibilidad de emputecer a una mujer con aspecto de niña buena. Esta fantasía erótica masculina está muy arraigada en muchos hombres. Mujeres con aire intelectual y jóvenes estudiantes que, con aire inocente, acaban resultando muy ardientes y fogosas, son las protagonistas fundamentales de estas fantasías eróticas masculinas.
Fantasear con famosas
Protagonistas también de muchas fantasías eróticas masculinas son las famosas. Mujeres como Scarlett Johansson, Elsa Pataky, Paz Vega o Olga Kurylenko se convierten en protagonistas de tórridas escenas en las que el hombre que fantasea eróticamente se dibuja como protagonista masculino y gozador único de los tesoros eróticos y los encantos de esas mujeres.
Las fantasías eróticas masculinas acostumbran a ir asociadas, en muchas ocasiones, a un juego de rol determinado. La criada sexy, la enfermera cachonda, la azafata morbosa, la geisha y otras figuras más o menos prototípicas de los juegos de rol erótico acostumbran a poblar la imaginación erótica de los hombres cuando se ponen a fantasear sexualmente.
Otra de las fantasías eróticas masculinas que sirven para incendiar la imaginación de muchos hombres es la de desvirgar a una joven de aspecto angelical. O la de hacérselo con la mujer, la madre, la hermana, etc. de un amigo.
Seguramente podrían encontrarse muchas fantasías eróticas masculinas más, pero éstas que te hemos señalado en este artículo son las más comunes y extendidas. ¿Te identifican especialmente con alguna de ellas?