El cunnilingus es una de las prácticas sexuales más placenteras para cualquier pareja, pues garantiza como ninguna otra el orgasmo femenino en la mayoría de las mujeres.
Según diversos estudios, a un gran porcentaje de mujeres el sexo oral les produce un placer mayor que el de la penetración, por lo que prefieren esta práctica sexual en sus relaciones.
Si tuviéramos que dar una explicación sobre lo que es el cunilingus podríamos decir que es la práctica sexual basada en la excitación de los genitales femeninos con la boca, la lengua o los labios y mediante el mordisqueo, el lamido, el chupar o la succión.
Dominar el arte del cunilingui (hay quien también le llama así) es dominar la forma de alternar y combinar diversas intensidades y movimientos. Experimentar con diversas combinaciones y variaciones es la mejor manera de divertirse realizando esta práctica sexual.
En este artículo vamos a hablarte de la estrecha relación entre esta práctica sexual y el orgasmo femenino y también destacaremos aquellos factores que intervienen en ella. Finalmente, daremos una serie de consejos básicos para hacer un cunnilingus.
Cunnilingus, estimulación del clítoris y orgasmo femenino
Que la mujer conozca su propio cuerpo y cómo reacciona éste a los distintos estímulos es clave para obtener el mayor placer de una sesión de sexo oral de este tipo. En base a ello podrá guiar a su pareja y podrá pedir.
A algunas mujeres les excita muchísimo la estimulación directa del clítoris, otras sin embargo, sienten mayor placer estimulando otras zonas erógenas como los labios vaginales o el perineo.
Puede que para alcanzar el orgasmo sea necesaria una combinación de diferentes estímulos. Encontrar la fórmula “perfecta” es solo cuestión de práctica. Ella permitirá encontrar la posición correcta, el ángulo, la velocidad, la cadencia y el ritmo que funcione mejor.
Si tuviéramos que darte algún consejo te diríamos que utilices tu imaginación y que crees tu propia posición sexual, algo nuevo. Experimenta con posturas y trata de mover las piernas y la pelvis de diferentes manera, hasta que encuentres la que mejor se adapte a ti.
Los placenteros efectos del cunilingus son tan “mágicos” que muchos terapeutas sexuales lo recomiendan para superar problemas como la anorgasmia, el vaginismo, la pérdida de deseo, la dispaurenia… Y es que siempre es más fácil alcanzar el climax sexual cuando se realiza una correcta estimulación del clítoris, y nada mejor que el cunnilingus para llevarla a cabo.
Veamos ahora qué factores son esenciales en esta práctica y cómo hacer un cunnilingus para que la chica obtenga todo el placer deseable en algo tan excitante como es esta modalidad estimulación oral.
Posturas para practicar un cunnilingus
En la práctica del cunnilingus, hay tres factores que son esenciales:
- La chica tiene que ser capaz de relajarse en una posición cómoda, como tumbarse en la cama o sentarse en el borde de una mesa, y simplemente, preparase para disfrutar.
- También es muy importante que el chico esté cómodo… ¡vas a estar allí durante algún tiempo!. Si estás en la cama, puedes apoyarte en un par de almohadas, si te resulta más cómodo, arrodillate en el suelo y que ella se siente en el borde de la cama … Haz cualquier variación que te resulte más fácil y cómoda como puede ser utilizar una mesa, una silla, etc.
- Si la pareja se decanta por la postura para sexo oral típica de la felación, donde la parte activa está de rodillas y la pasiva de pie, hay que tener en cuenta que en este caso esta postura sexual no es la más recomendable porque dificulta el acceso de la parte activa a su objetivo y será más difícil que la parte pasiva alcance el clímax. Si se desea realizar esta posición de sexo siempre será más fácil conseguir una correcta estimulación si la parte pasiva apoya una pierna sobre una silla o mesa baja.
Otra de las maneras más famosas para disfrutar con el sexo oral es el “69”. Es una de las posturas más típicas, popularizada durante años en películas porno, y que resulta especialmente morbosa a los hombres.
No obstante, pocas chicas consiguen realmente el orgasmo a través de estas posiciones pues son incapaces de relajarse y concentrarse en él. Un buen recurso consiste en utilizar estas prácticas como “antesala de”; es decir: como juegos eróticos que harán aumentar la excitación.
Lo mejor, en cualquier caso, es estar atentos a cuando la excitación femenina se va incrementando para pero cuando se sienta que ella está a punto, tumbarla y regalarle un magnífico cunilingui. ¿Haciendo qué? Haciendo lo que vamos a explicar en el apartado siguiente.
Cunilingus: ¿cómo hacerlo?
Teniendo en cuenta lo referido hasta el momento, vamos a ver cómo debe comportarse quien va a hacer un cunnilingus a una mujer. Se pueden aprender técnicas observando cómo lo hacen los maestros del género. Para ello basta con teclear en tu buscador video cunnilingus para encontrarnos imágenes de chicos y chicas realizando este tipo de estimulación oral a su pareja.
Nosotros vamos a darte aquí cuatro consejos básicos que casi nunca fallan y que casi siempre terminan así: con una espectacular explosión de placer.
Una regla básica en esta práctica es la de empezar poco a poco para ir incrementando tanto el ritmo como la presión de la estimulación. No hay que olvidar que para muchas mujeres el clítoris es demasiado sensible y presionarlo directamente puede resultar desagradable.
Así, lo primero que habría que hacer sería deslizar la lengua suavemente entre los labios vaginales desde abajo hacia arriba y desde arriba hacia abajo para, a continuación, ascender en cortos zigzags hacia el clítoris.
Poco a poco, mientras se incrementa la excitación de la mujer, ella aproximará su pelvis al maxilar de la parte activa buscando inconscientemente un incremento del ritmo e intensidad de la estimulación. Será entonces cuando tocará intensificar los círculos y arrimar la boca a los labios. Si la pelvis se retira, habrá que ampliar los círculos sobre la vulva para, de vez en cuando, rozar leventemente el clítoris. En esta fase pueden empezar a intervenir, si se desea, los dedos.
Cuando se haya incrementado más aún la excitación habrá que pegar bien la cara al pubis y mover la lengua, presionando, de arriba abajo. En esta fase se alternará cada cierto tiempo con un movimiento circular que abarque toda la vulva.
Cuando la lubricación se haya intensificado lo suficiente se deberá sujetar fuertemente las caderas y se deberá introducir la lengua en la vagina para realizar lo que se conoce como beso de colibrí.
Con estas actuaciones y variaciones en la estimulación oral es fácil que la mujer alcance pronto el orgasmo. Si se demorara en ello se deberá insistir con la lengua sobre el clítoris, al tiempo que se introduce el dedo índice con la yema hacia arriba para estimular el punto G. Si se actúa de ese modo es muy probable que la chica tarde muy poco en tocar el cielo con las manos.